¡Claramente la respuesta es SI!

La incorporación del dietista-nutricionista en los equipos multidisciplinarios de atención primaria, especializada y de salud publica que disponen atención sanitaria integrada según su papel específico en la promoción, la prevención, el tratamiento y la rehabilitación de enfermedades prevalentes en España, y con ello benefician a la salud individual y colectivo de los ciudadanos y ciudadanas.  

Según nuestro CÓDIGO DEONTOLÓGICO uno de los principios generales, de responsabilidad, es: "El dietista-nutricionista dirigirá su labor profesional al servicio de la salud en el ámbito de la alimentación según los estándares de buena salud tipificados internacionalmente."

Y por estas dos raciones, que son de peso, y viendo los hábitos de la población en cifras de La Vanguardia puedo asegurar que ¡los dietistas - nutricionistas tenemos mucho que hacer!

Cristina Piñar y Riba